28 nov 2009
No me digas que te hago llorar cuando sos vos el que con una mirada me pone híper depresiva;
No digas que me vas a esperar cuando no hay nada que entregar;
Si estoy en la fase de muerta viviente, para que te engañas diciendo que el “nosotros” va a ser posible de nuevo?
Si nunca voy a regresar acá, si mis planes salen como quiero no voy a volverle a ver la cara a este pueblo careta, aunque vaya a extrañar a la poca gente que vale la pena de acá;
Si ellos no se van a acordar de mi existencia.
Ni van a preguntar que me paso.
Si estoy viva o muerta poco les importa.
Y en realidad, lo mismo me da a mí también.
Ahora cada cosa que veo, todo lo que toco me recuerda a vos.
Porque no olvido como se sentía tu mano sosteniendo la mía;
Tus labios presionando sobre los míos;
Tu sonrisa entibiando mi enojo;
Todas esas cosas que te hacían especial no dejan de existir para mí.
En mi mente te tengo presente siempre;
Aunque lo niegue, aunque te vea con alguien más…
Porque tu mano sostiene la de otra chica, pero yo no puedo dejar que alguien más se acerque a la mía.
Porque tu mente no me recuerda, pero yo no puedo pensar en otro hombre.
Es así, y ya no puedo leer una historia de amor sin recordarte y llorar, no puedo escuchar música sin deprimirme.
No puedo estar con mis amigas, porque su felicidad me recuerda a la que yo sentía al estar con vos, al escuchar tu voz.
Al temblar con un TE AMO…
De esos especiales, que sólo vos sabías decir, y que ya no voy a escuchar.
Nunca Más…
Porque todo termino…
Y yo ya no soy yo, porque queda únicamente mi carcaza, mi alma está dentro de tus bolsillos, por si algún día la querés de vuelta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario